El Comité Internacional de Rescate (IRC) reconoce la reunión virtual entre el Secretario de Estado de los Estados Unidos Antony J. Blinken y los secretarios de Relaciones Exteriores y Economía de México, Marcelo Ebrard y Tatiana Clouthier, como un paso importante y prometedor hacia la restauración de los sistemas de asilo y la respuesta a la crisis migratoria en la frontera de México y Estados Unidos.

Los más de 65,000 migrantes que viven en el lado mexicano de la frontera entre Estados Unidos y México son un recordatorio de que la migración y el desplazamiento en América Latina son problemas multifactoriales que requieren cooperación internacional y un enfoque integral. Los solicitantes de asilo usualmente esperan de 9 a 16 meses para el procesamiento de sus casos, tiempo en el que se enfrentan a condiciones de vulnerabilidad, sin acceso a servicios básicos o vivienda segura, muchas veces sin vivienda en absoluto.

Durante 2021 se esperan más de 70 mil solicitudes de asilo en México, 50% más que el monto proyectado para 2020 (ACNUR). Fortalecer los procesos y sistemas de asilo de EE. UU., garantizando que sean justos y humanos, es un paso esencial, pero se requieren otras acciones en toda la región para brindar soluciones a largo plazo.

Raymundo Tamayo, Director de País en México para el IRC, dijo: “Si bien hay un gran enfoque en lo que sucede en la frontera entre Estados Unidos y México, hay más por hacer para abordar las causas de la migración desde el norte de Centroamérica, el lugar de origen de muchas personas que actualmente están esperando en ciudades fronterizas, como Ciudad Juárez. La cooperación internacional es fundamental para abordar las causas raíz de la migración y crear capacidades de protección en los países de origen y tránsito. Las personas merecen estar seguras en sus comunidades. Para aquellos que no pueden encontrar seguridad allí, una cooperación regional más fuerte puede garantizar que estén en mejores condiciones para encontrarse seguros más cerca de casa y permanecer seguros en sus viajes.

México podría evolucionar de un país de origen y de tránsito a uno con sistemas y procesos de asilo y reasentamiento sólidos, que pueden ser seguros para que algunas personas reconstruyan sus vidas. Aún así, el país enfrenta altas tasas de inseguridad y desafíos sociales que amenazan el bienestar, tanto de los migrantes como de los nacionales, que requieren atención inmediata.

La cooperación entre países y sectores será clave en la respuesta a la crisis migratoria. Las ONG internacionales, como el IRC, pueden aportar una amplia experiencia y capacidades para responder en diferentes etapas del arco de la crisis, pero se necesita financiamiento para apoyar y ampliar la programación en la región ”.

El IRC en México brinda apoyo para el desarrollo de capacidades de socios locales para aumentar y mejorar la disponibilidad y calidad de los servicios en las ciudades fronterizas. Su programación actual incluye el apoyo a la protección y el empoderamiento de la mujer; recuperación y desarrollo económicos; salud mental y apoyo psicosocial; orientación cultural y acceso a información crítica a través de InfoDigna, parte del proyecto Global Signpost. Desde el comienzo de la pandemia por COVID-19, el IRC también apoya un hotel “filtro”, para proporcionar espacios para realizar pruebas, diagnóstico y aislamiento para los migrantes, evitando que el virus se propague en otros refugios.

 

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